
El dispositivo velará por la seguridad y la regulación del tráfico tanto en ‘La Bajá’ como en el resto de actos programados
Este miércoles comienza la Real Feria y Fiestas en honor a María Santísima de la Sierra, patrona de Cabra, que regresará a la ciudad -como manda la tradición- el próximo jueves, cuatro de septiembre. Sin duda, el punto álgido dentro de las Fiestas Mayores ya que tiene lugar ‘La Bajá’ de la venerada imagen desde el Santuario, a partir de las 16.00 horas, culminando con la entrada triunfal por los Arcos de la antigua calle Baena y su llegada a la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción y Ángeles, en torno a la medianoche.
Con tal motivo, el Ayuntamiento de Cabra vuelve a coordinar un operativo especial con el objetivo de garantizar la seguridad, tanto ciudadana como del tráfico, en jornada central de la Real Feria y Fiestas “donde vamos a contar en las calles y en los caminos con miles de personas ya que se desarrollan parte de los actos más relevantes de la programación”, ha afirmado el alcalde, Fernando Priego, quien ha comparecido esta mañana para explicar todos los detalles de este dispositivo junto a los responsables municipales de Feria y Fiestas y de Seguridad y Tráfico, Rosi Lama y Guillermo González, así como los hermanos mayores de la Real Archicofradía, Francisco José Rojano, de la Hermandad de San Rodrigo Mártir-Costaleros de la Virgen de la Sierra, Manuel Jesús Criado, y miembros de la Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local, que intervendrán en el operativo.
Así, a partir de las 9.00 horas quedará activado el servicio de autobuses de subida al Santuario para los peregrinos que quieran acompañar a la Virgen en ‘La Bajá’. Será, como cada año, en la avenida Fuente del Río, junto a la fuente de ‘Caño Gordo’, con el inicio de la venta de billetes para acceder a alguno de los 15 autobuses que cubrirán esta ruta.
“Los autobuses irán subiendo conforme se complete su aforo, siendo el último en partir a las 15.00 horas”, ha explicado Francisco Rojano, quien ha subrayado que “una vez que comiencen a subir autobuses los turismos que suban al picacho no podrán bajar y deberán permanecer en la Sierra hasta que la Virgen se adentre en ‘La Viñuela’ y deje libre la carretera”.
Igualmente, el máximo responsable de la Real Archicofradía ha adelantado que “contaremos con seguridad privada tanto en ‘Los Colchones’ y ‘La Viñuela’ para permitir sólo el paso de vehículos autorizados como en el propio Santuario desde la madrugada del día 3”, recordando que “están prohibidas las acampadas en todo el recinto del Santuario y no se permitirán botellones ni actitudes incívicas”.
Por su parte, el hermano mayor de San Rodrigo Mártir ha pedido a los peregrinos “que adelanten todo lo posible la subida al Santuario para permitir que, aquellas personas que salen de trabajar a mediodía, puedan utilizar este servicio y no se produzcan aglomeraciones a última hora”. La entidad cofradiera, como es habitual, también se ocupará del avituallamiento de los romeros durante el camino “con 4.200 litros de agua fresca que ofreceremos en las diferentes paradas”, ha apuntado Criado.
En cuanto al regulación del tráfico la carretera de acceso al Santuario quedará cortada a la circulación por la Guardia Civil “cuando se completen todas las plazas de aparcamiento habilitadas en la Ermita”, ha indicado el Rafael Huertas, señalando que “a partir de las 15.00 horas se restringirá completamente la circulación desde ‘La Nava’ para garantizar la seguridad de los peregrinos que adelantan su salida desde el Santuario y discurren por la carretera”.
Por último, Guillermo González ha recordado que “volveremos a contar con el operativo especial para la Batalla de Flores el día cinco, con un recorrido vallado y efectivos seguridad” haciendo un llamamiento al civismo y, especialmente, a las familias “para que en todo momento estén pendientes de los más pequeños ya así evitar posibles riesgos al acercarse a las carrozas”.